La Bioneuroemoción es el arte de acompañar a la persona a encontrar la emoción oculta, esencial (el resentir) asociada al síntoma que hay (la enfermedad) para descodificarla y así favorecer la curación mediante la liberación de la emoción que hay en el inconsciente y trascender dicha emoción transformándola. Enric Corbera

¿ PARA QUÉ MI BIOLOGÍA SE EXPRESA DE ESA MANERA?

Juana María Martínez Camacho

FORMACIÓN EN BIONEUROEMOCIÓN: acompañante en Bioneuroemoción.

Diplomada:

CP-1 Bases de Biodescodificación por la aeBNE (Asociación Española de Bioneuroemoción)

CP-2 PNL (Programación Neurolinguistica) e Hipnosis Ericksoniana aplicadas a la Biodescodificación (Bioneuroemoción).

CP-3 Formaciones Específicas en Biodescodificación (Bioneuroemoción)

tel. 653-936-074

www.centroelim.org

Av. Sudamérica 7 (junto a Plaza Los Libertadores)

Roquetas de Mar- Almería- España

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domingo, 15 de noviembre de 2015

LA VALORACION Y EL APARATO OSTEO-ARTICULAR-


HUESOS 
Nuestro esqueleto se compone de dos tipos diferentes de células:

 • Los osteoblastos, que fabrican el hueso.
• Los osteoclastos,  que destruyen el hueso.

 Y nos pasamos la vida entera destruyendo y reconstruyendo nuestro esqueleto y lo mismo para todo el resto del tejido conjuntivo. Vamos a destruir, en el lugar que ya no nos es propio, y llevará el calcio para construir donde nos es necesario. Es lo que hace que alguien que está constantemente en el ordenador, tenga el esqueleto de las manos más denso, que alguien que es jardinero. Tenemos el esqueleto estimulado por su trabajo, si alguien es astronauta, no necesita esqueleto, porque no hay gravedad, y el esqueleto se descalcifica porque no tiene valor, no tiene utilidad. El astronauta no es una persona que se desvaloriza, de manera lógica tenemos que entender. Es una desvalorización a nivel biológico. Tener un esqueleto en el espacio, no tiene valor.

Para nosotros, tener un oso de peluche o unos juguetes, no tiene valor. Es lo que teníamos cuando éramos niños. Tener una bicicleta ya no tiene valor. En cambio, el niño no se preocupa por su jubilación, no tiene valor para él, no es sobre esto que se está estructurando.  Por lo tanto, el esqueleto se destruye y se recalcifica y lo que ocurre en la biología es idéntico a lo que sucede en nuestra vida. Lo que significa que desde nuestro nacimiento hasta nuestra muerte, pasamos de un valor a otro valor. 

Cuando somos bebés, ¿Qué es lo que tiene valor para nosotros? estar con su mamá, sentirse seguro, tener estímulos,…  
Cuando somos niños, es tener juguetes, amiguitos, amiguitas,…
Cuando llegamos a la adolescencia, tiramos nuestros juguetes, mientras que cuando éramos niños era lo más importante, no debían quitárnoslos. Nos estructuramos sobre esto, mientras que cuando somos adolescentes nos vamos a estructurar sobre otra cosa. La bicicleta ya se vuelve moto, los juguetes se transforman. Lo que va a importar ahora es seducir, por ejemplo, ligar,…
Pasamos a ser adultos, nos casamos, la moto ya la podemos dejar. Por lo tanto destruimos estos valores, este esqueleto y los reemplazamos por otros valores, el trabajo, la familia, la pareja, tener hijos,… 
Nos volvemos adultos de cuarenta o cincuenta años y los valores son distintos. Es la edad que necesitamos hacer lo que es más importante para uno mismo. De los 20 a los 40 años, nos hemos comprometido, pero a los 45 años ya nos decimos: "yo quiero hacer lo que quiero, viajar, estudiar,…”, otras cosas. 

Entonces vemos que hemos descalcificado y recalcificado, llegamos a la madurez. Miramos hacia atrás, con mucha ternura, nuestros dramas, diciéndonos que no era tan importante, y encontramos que la sabiduría, es una experiencia suprema y accedemos al valor esencial de nuestra vida. 
Por lo tanto, fundamentalmente ¿qué es una desvalorización? No es porque dicen los demás que yo soy malo, no es porque soy mal padre o mala madre, o incapaz de hacer deporte. En su esencia, no es esto la desvalorización. 
En la superficie sí, es así, en terapia la gente suele decir: “si, me han dicho que no sirvo para nada…”, el niño dice: “el profesor dice que no soy un buen alumno…”, el adolescente dice “las chicas no me miran…”, el adulto dice “en mi puesto de trabajo no sirvo…”.
Esto es la parte pre consciente.

Pero fundamentalmente la desvalorización es una falta de revalorización, es una falta de evolución. Alguien me dice que soy mal alumno, ¿con que nuevo valor voy a reconstruirme? Si no tengo acceso a esto, voy a descalcificarme. 

La desvalorización tiene básicamente 4 conflictos:

a. La Falta de Respeto. Falta de amor hacia uno mismo.
b. La obtención de resultados obligatorios.
c. Tener una dirección en la vida. Impotencia, tener que soportar.
d. La comparación. La evaluación de mi hábitat.

  Típicamente es el caso de la mujer de cincuenta o sesenta años,  su marido ya no se interesa tanto por ella físicamente, sus hijos ya no la necesitan, y ella misma se dice: “ya no tengo valor…”, es la osteoporosis.

Pero para mí, en realidad, el problema es el siguiente: mira hacia el pasado, mira lo que ya no está, pero se niega a mirar hacia el futuro. Cuando hay menos sexualidad con el marido, cuando ya no tiene que hacer tareas con los niños, esto me permite acceder a… ¿Qué tipo de valor? Y es con esto con lo que debo reconstruirme.

Una reflexión sobre la desvalorización…
Que es lo que tiene valor para un niño de 1 año…comer, sus padres, protección…un juguete, algo de la madre…
• para 1 niño  de 3 años que va a parvulario, es su maestra…
 • para un niño de escuela lo importante es jugar en la escuela…
• para 1 chico de 18 años, las chicas, la parte social, las notas...
 • cuando tiene 30 años, lo más importante es la carrera profesional…
 • para una persona de 50 años, es mirar atrás y ver el camino recorrido…y  • a los 80 los valores cambian,… son los valores en los cuales nos construimos y hay valores que se construyen cada día… los valores cambian y se transforman…hay un paso de un valor a otro…la motivación…unos valores pierden peso y otros ganan pero siempre pasamos de uno a otro…

Dentro de las células hay otras… los osteoblastos que son los que construyen el hueso…que hay continuamente reconstrucción, se calcifica más lo que más valor tiene para la persona… lo que ya no tiene valor para la persona descalcifica… 
Hay reconstrucción continuamente, sobre todo mientras dormimos…el peligro de la desvalorización viene del rechazo a construirme sobre nuevos valores… la osteoporosis en las mujeres es que han de dejar de ser madres y no tienen una meta donde revalorizarse.

En el momento que pierdo un valor y no tengo otro de nuevo, es en este momento donde aparece la osteoporosis… en terapia se debe construir un valor en positivo…

En la 3ra etapa, en terapia, es importante encontrar un nuevo valor.

  Los valores morales surgen primordialmente en el individuo por influjo y en el seno de la familia, y son valores como:
 • el respeto
 • la tolerancia
 • la honestidad 
 • la lealtad 
 • el trabajo

                                Fuente: Diccionario de Biodescodificación. E. Corbera

jueves, 5 de noviembre de 2015

ENTREVISTA A ENRIC CORBERA


 “El despertar de la conciencia biológica”
 Enric Corbera, director del centro de terapias Natural Enric y del Instituto Español de Biodiscodificación nos desvela los secretos del despertar de la conciencia biológica con importantes apuntes sobre esta ciencia en auge: la BioDescodificación.
Según Enric, casi todo aquello que somatizamos viene “gracias” a nuestro subconsciente y comenta que, según las afirmaciones de diferentes neurocientíficos, el subconsciente es el que realiza el 97% de nuestros actos en forma de “rutinas” diarias, heredadas en su mayoría de nuestro Transgeneracional, y sólo del 1 al 3 % de ellas son actos que realizamos conscientemente.
¿No aceptar un hecho traumático es lo que desencadena el inicio de una enfermedad?
No, eso sería una explicación mental, el inconsciente es muy biológico, hay mucha gente que intenta dar muchas explicaciones psicológicas a aspectos del inconsciente haciendo un trabajo largo y cansado para llegar a un camino sin salida, mientras que un impacto heredado que se ha anclado en él, mejor dicho congelado, está allí a la espera de desencadenarse por un acontecimiento parecido o repetido en el tiempo.
Entonces, ¿la adaptación al entorno adverso puede ser negativa para nuestro cuerpo?
La adaptación es biológica, tenemos patrones de comportamiento que se activan de forma biológica, donde nuestra mente consciente no puede hacer nada para cambiar nuestros actos. El Inconsciente Biológico siempre tiene un Sentido Biológico y éste es de adaptación a los cambios del entorno que provocan un sobre estrés. Por ejemplo un mono, si no puede copular con su hembra por el nacimiento de un hijo, puede  llegar a matar a éste para poder realizar el coito con ella.
La diferencia entre un ser humano y un animal, es que muchos de los conflictos en los humanos son simbólicos, no son reales, pero el inconsciente no los sabe diferenciar.

¿Qué es primero la enfermedad o la emoción?
Está clarísimo que lo primero es la emoción, en la naturaleza hay códigos de hace millones de años, nuestro cerebro esta formado por el cerebro reptiliano, muy antiguo hasta el neocortex, el más nuevo como su nombre indica. Se produce siempre un impacto que afecta a la Psique, al Cerebro y al Cuerpo a la vez.
El Dr. Oncólogo Hamer, después de la muerte de su hijo, desarrolló un cáncer de testículo y la madre uno de pecho, y fue entonces que empezó a estudiar cómo afectaban las emociones en la generación de cánceres, y en el momento que asumió la consciencia biológica de su enfermedad se curó… esa es la misión de la Biodescodificación.
El descubrimiento de Hamer fue relacionar las etapas embriológicas con los órganos del cuerpo, cada etapa embrionaria desarrolla unos órganos específicos del cuerpo, primero el cerebro que regula a los órganos arcaicos del movimiento y las relaciones.
La Biodescodificación trabaja utilizando el diagnostico del médico como partida para su tratamiento, es un método que optimiza los tratamientos convencionales tradicionales, complementarios o alternativos, es asumir conscientemente que tu inconsciente está dando una solución biológica a una demanda emocional, y que tú tienes las herramientas para sanarte.
De todas maneras la Biodescodificación tiene por objetivo principal “mover emociones” y cambiarlas en la situación traumática.

¿Se  han realizado experimentos científicos que demuestren la efectividad de la Biodescodificación?
Sí, en Cuba, la Universidad de Medicina ha realizado tres experimentos con resultados muy favorables que confirman que la Biodescodificación es un método válido que puede ayudar a optimizar y acelerar los procesos de curación de las enfermedades. Siendo el gobierno cubano el más interesado ya que el ahorro económico por reducciones en los tratamientos médicos es muy importante.
El cáncer es una adaptación biológica de urgencia, a la gente que tiene cáncer les digo: “Tu quieres curarte, ¿no? pues mi experiencia me dice una cosa…coge tu vida y dale la vuelta como un calcetín”. Esto quiere decir que cuando uno comprende, cuando uno cambia su percepción por el cambio de emoción, esto se debe de traducir, siempre que se pueda, en acción. No debe de ser una acción conductual, sino una cambio de conducta producida por un cambio emocional.
¿Es incompatible la Biodescodificación con el tratamiento farmacológico?
La intervención de las farmacéuticas es imprescindible, la medicación tiene su lugar, no hay que caer en la trampa de que la medicación todo lo cura, pero la medicación es de vital importancia en la primera fase de curación emocional, cuando la persona asume conscientemente el origen de su enfermedad, ya que en este punto el cuerpo entra en una fase “vagotónica” que necesita el refuerzo de los fármacos para superar la crisis hacia la curación.
Hay que diferenciar entre la consciencia farmacéutica, que busca curar a las personas en el menor tiempo, y los medicamentos que buscan generar enfermos crónicos para su mayor enriquecimiento económico.
La Biodescodificación no quiere sustituir a nadie ni a nada, pero sí pretende que cualquier persona tenga consciencia de que sus males pueden ser transmutados tomando consciencia de la emoción que los generó en nosotros o en nuestros ancestros, siendo las personas que nos rodean un espejo perfecto donde vemos reflejadas nuestras actitudes, que rechazamos o aceptamos, dependiendo de nuestras creencias conscientes.
Nosotros estamos acostumbrados a buscar las soluciones de nuestros males en el consciente. Allí encontramos las soluciones que nos interesan. En el consciente podemos justificar, razonar y explicar lo sucedido. Pero la solución está en el inconsciente, aquel lugar oscuro donde no queremos ir, porque en él se encuentran las auténticas razones que no queremos ver ni escuchar.
Hay que tomar consciencia de que la emoción es la clave, es la que nos permite vivir, es el motor.

 Carles Soro

domingo, 1 de noviembre de 2015

El impacto de las creencias.


“Cuanto más dramáticamente se viven las circunstancias, menos tiene el niño capacidad de analizarlas. Sin embargo, está empujado por la necesidad de dar un significado a lo que le ocurre, como si esta atribución de sentido valiera más que la “nada “ caótica que está viviendo”. Josiana de St. Paul.

Una creencia se coloca a partir de un acontecimiento de referencia que es a veces, un golpe.

Durante la infancia, el ser humano busca la regla del Yo (juego). Una necesidad vital le empuja a hallar un sentido a todo lo que vive. La naturaleza tiene, parece ser, horror del vacío. Cuando ocurre un suceso, le atribuye un sentido, arbitrario probablemente, pero que probablemente es el único que pueda dar en aquel momento.

A partir de una o varias experiencias, el niño generaliza. Es un aprendizaje que permite adaptarse para sobrevivir. Cuando es muy fuerte, traumatizante, una sola experiencia puede bastar para la instalación de una creencia. Hay temperamentos psicológicos para los cuales un suceso bastará, sobre todo si se remonta lejos en la infancia y que este acontecimiento está vivido con una persona significativa, padre, madre, maestro…

Así, las creencias representan una adaptación al entorno que nos permite estar vinculado con él, pero que al mismo tiempo nos aísla. Ya no vemos el entorno sino nuestras creencias. Son filtros que tenemos entre el mundo y nuestra comprensión del mundo. Percibimos el mundo a través de los criterios que queremos satisfacer, a través de las esperas (en el sentido de presupuestos) que desforman la realidad y modelan la percepción, selectiva, que tenemos de él.

Cuando el ser humano vive una serie de sucesos agradables, su inconsciente busca lo que es común en todo esto. Se construye a partir de ahí, y siempre va a buscar este elemento común. A partir de aquí, se construye y siempre buscará este elemento común. Si en su infancia tenía cumplidos, recibía la estima cada vez que conseguía algo, buscará siempre tener éxito en su vida. 

Del mismo modo, busca el factor común en los sucesos desagradables. Esto puede ser cada vez que enseñaba sus emociones, sus padres lo criticaban, le hacían la moral, o bien lo ridiculizaban. En sus actitudes, buscará apartarse de esto: evitará hablar de sí mismo, ya no enseñará sus emociones. 

Una única vivencia muy fuerte puede bastar para la instalación de una creencia, sobre todo en el niño joven en pleno aprendizaje.

Ej. Cuando vuelve de colonias, un niño descubre que su mamá dio a luz.
Repentinamente, se vuelve menos importante. Esta única experiencia crea en él un sentimiento de desvalorización y una creencia que nunca hay que marcharse, porque cuando uno se va, puede uno estar sustituido.

En el campo psicológico, todos estamos sostenidos, dirigidos por nuestras creencias. Estas tienen una estructura y un contenido. Si el contenido puede variar al infinito, la estructura en cuanto a ella, siempre es la misma: se trata de una conexión arbitraria entre dos objetos, concretos o abstractos. Esta estructura puede adquirir dos formas: la igualdad o la implicación ( A = B; A -> B).

Por ejemplo, alguien dirá (1° estructura): Amarse es mirar en la misma dirección… Está convencido de ello. Es una creencia, en la cual relaciona el hecho de amar y el de mirar en la misma dirección. Pero otros tienen la creencia que amarse, es mirarse a los ojos…

Muchas personas establecen un vínculo entre su identidad y un valor: Soy nulo, no valgo nada… Hacen un nexo entre su ser, su identidad y la nulidad: yo = nulo. Una creencia sumamente frecuente es: soy víctima de mi destino, víctima de los demás…

Existe otro tipo de unión (2° estructura): esto implica aquello.
Cuando se ama, se da todo. Pero cuando se da todo, no por esto se ama!

Las creencias son pues un nexo entre dos objetos independientes, este nexo siendo o bien un nexo de igualdad, o bien un nexo de implicación.

Al apartarnos de la realidad, nuestras creencias nos condicionan. La creencia opera como un filtro selectivo, a partir de una generalización, y va a colocar una distorsión entre lo real y nosotros, apoyándose en el hecho que cada ser humano está obligado a seleccionar la información, en todo lo que sucede alrededor nuestro y su historia…selecciona las cosas que pueden hacerle sentir placer o hacerle sufrir, en función de sus creencias. Sus creencias inducen emociones, agradables o desagradables, las cuales inducen comportamientos y a su vez, esos comportamientos van a inducir emociones.

Somos esclavos de nuestras creencias inconscientes, constantemente.

Porque casi nunca reflexionamos, conscientemente, sobre nuestras creencias. Son para nosotros unos truismos, unas evidencias. Es tan obvio que uno ya no se pregunta. Preferimos validar nuestras creencias que volverlas a plantear.

Hay que precisar que naturalmente, hay creencias que abren, son generativas y creencias que son limitativas.

Aunque sean frecuentemente, trabas terribles y la fuente de numerosos tormentos, estamos terriblemente atados a nuestras creencias.

Porque son para nosotros un modo de controlar las cosas, de organizar el mundo exterior, de racionalizar. O incluso nos permiten resolver la angustia del vacío.

Las creencias son vinculadas al sentido, al sentido de la vida, de los acontecimientos, ej. un acto insensato en el plano político, una catástrofe natural, una enfermedad grave….Si se tiene una creencia, por ejemplo de que tal persona está enferma porque hizo un pecado, como para el ciego nato del Evangelio (Es él o sus padres? Juan 9), o si es un cabeza de turco, que su sufrimiento sirve al grupo, u otra cosa… esta creencia alivia. 

Estamos tan atados a nuestras creencias porque en un momento dado, en nuestra infancia, nos ayudaron, y hemos construido un montón de cosas aquí encima. Volver a plantear nuestras creencias, sería volver a plantear todo un período de nuestra existencia, el modo en el cual hemos vivido, incluso sobrevivido.

Las creencias están aquí para construirnos, pero cuando son tóxicas, pueden destruirnos.

Nuestras creencias son nuestros maestros o nuestras sirvientas? En un primer tiempo, son nuestras sirvientas, pero se vuelven nuestros maestros.

Se puede llegar a límites extremos, la locura, la patología, el crimen en nombre de una creencia.

Generalmente, el hecho de tomar consciencia de una creencia no basta para deshacerse de ella o incluso relativizarla. Es verdad que a veces sucede que, al poner una creencia en evidencia, las personas “desprograman” inmediatamente estallando de risa… Porque de hecho la creencia había sido colocada en la infancia, con ocasión de una experiencia, luego la persona evolucionó. La creencia por así decirlo, había cogido su autonomía, se había vuelto ilógica y condicionaba a la persona. Y cuando se toma consciencia, a veces estalla de risa y ya está, se terminó, porque hizo un camino y se da cuenta que esta creencia se ha vuelto obsoleta y ridícula.

Pero otras personas quedan aferradas a sus creencias porque no tienen otras. Sólo se actúa en una creencia cuando se tiene otra de sustitución que satisface a la persona. Se trata de ensanchar las opciones, no quedarse preso de una sola creencia que puede ser tan obstaculizante.

En terapia, se buscará descubrir la creencia, se pedirá a la persona si quiere conservarla y se hallará otra nueva que satisfará la intención positiva de la primera. Por fin se podrá desestabilizar la creencia limitadora

tomando consciencia de que ésta no es forzosamente una ley, que puede haber contra – ejemplos, que otras personas pueden pensar diferentemente

y que están en buena salud, o incluso haciendo un balance de las ventajas e inconvenientes si se llega a conservar esta creencia tal cual es.
                                                                                                       Christian Fleche