Esquema
de la pirámide: (Base: n° 0; cumbre: n°16.)
0:
proyecto – sentido de la vida/ debajo del tálamo.
1:
supervivencia arcaica / endodermis
2:
seguridad, protección / mesodermis antigua
3:
Comodidad / mesodermis antigua
4:
Exploración / meso nueva; ecto.
5:
Dar valor / mesodermis nueva.
6:
Pertenencia / corticosuprarrenales
7:
estima de sí / tálamo
8:
ser reconocido / ectodermis
9: Tener su lugar / ectodermis.
10: consciencia del pasado / epidermis;
neuronas (células estables)
11:
ser oído, entendido / digestivo; salpicado
12:
aceptación de lo real / salpicado
13:
Estabilidad/ renal; salpicado.
14:
Cambio / libertad/ respiratorio, salpicado.
15:
el instante / fuera conflicto
16:
Frustración imposible: fuera biología.
Nuestra biología está marcada por un número
definido de ―casillas‖ como las cajitas de una
imprenta; Caracterizan nuestra especie y nuestra función ecológica. Sólo podemos apreciar a Mozart
porque tenemos orejas. En cuanto a los perros, aprecian los ultrasonidos y el
ruido de las presas. Esta observación, para recalcar esta realidad biológica en
referencia. Empezamos por lo biológico para ir hacía lo psicológico. La vida
primero fue biológica, biológica por naturaleza, y psicológica por accidente.
Por esto debemos desde el principio, apoyarnos en lo que es vivo, en el
desarrollo del embrión. Estos elementos fundamentales, fundadores de nuestra
identidad biológica, son los fundamentos de todas nuestras necesidades.
Inspirándonos en Maslow y otros autores, podemos proponer una Pirámide de
Necesidades Biológicas según las etapas del desarrollo psico – afectivo de lo
vivo (endo, meso y ectodérmicas)
0.Necesidad de ser el proyecto de
alguien diferente de uno – mismo, para ser ―erecto‖ (impulso) y sentido.
1.Necesidades
arcaicas de supervivencia: de
un trozo de alimento renovable, de aire,; de perennizar la especie. Necesidades
endodérmicas: aparatos digestivo y respiratorio; sexual.
2.Necesidad
de seguridad: de
protección contra los agresores, los predadores. Se trata, para controlar las
situaciones, de envolverse, coger una máscara o esconderse (cameleón)
Necesidades mesodérmicas antiguas.
3.Necesidad
de comodidad: de
protección contra el frío, el calor, los ultravioletas; necesidad de sueño.
Mesodermis antigua.
4.Necesidad de crecer, explorar. Mesodermis
nueva: los músculos; ectodermis: los órganos de los sentidos y los nervios
motores.
5.Necesidad
de dar valor,
sentido a cada órgano físico. Mesodermis nueva: el esqueleto, los tejidos
conjuntivos.
6.Necesidad
de pertenencia,
de inclusión en un grupo. Mesodermis nueva: las glándulas suprarrenales, los
parénquimas renales.
7.Necesidad
de estima de sí,
por los demás y por sí - mismo. Ser amado y amarse (tálamo).
8.Necesidad social, relacional: ser
reconocido por el padre y la madre, el jefe, los clientes, los pacientes, la
panadera y todo el universo… para volverse autónomo. Ectodermis: recto,
epidermis, aparato digestivo; gónadas mesodérmicas. 313
9.Necesidad de tener
su lugar: en un territorio de caza delimitado, respetado y
un territorio sexual seguro. Ectodermis: venas, arterias coronarias, vejiga,
cuello uterino, bronquios, laringe.
10.Necesidad de
consciencia del pasado en sí: poder nombrar lo que
se vive en sí, concienciar, llegar y por ahí curar las memorias inconscientes
familiares y personales en sí. Estar salpicado.
11.Necesidad de ser
oído hasta el final; en todas las emociones, de sentirse
aceptado. Aparato digestivo.
12.Necesidad de
olvidar lo ideal: en sí y según uno – mismo, del
padre/madre ideales que nunca tendré, del jefe ideal, de la mujer ideal, de los
hijos ideales que nunca tendré. Vías biliares y salpicado.
13.Necesidad de
dirección, de indicadores, de espiritualidad que
no cambie. Aparato urinario; los salpicados.
14.Necesidad de
creación, de perpetuarse, realización de sí, de libertad,
de lo desconocido, de espiritualidad que cambia. Aparatos respiratorio y
sexual.
15.Necesidad de vivir
el momento presente. Fuera conflicto.
16.Necesidad de ya no
tener necesidad. Fuera biología.
Cuando este conjunto de necesidades está satisfecho,
ya no hay preguntas ni angustias en el sentido de la propia vida o propia
misión. Si las necesidades fundamentales no están satisfechas, las demás
tampoco lo estarán. Si no como, no podré satisfacer mi necesidad de mirar la
película el domingo por la noche que forma parte de las necesidades más
secundarias. Si el ser humano olvida su realidad biológica, su misma realidad
biológica no le va a olvidar y se manifestará con esta llamada al orden que es
el síntoma. Se tendrá hambre o sed si se olvida de comer o beber. Las
necesidades biológicas fundamentales son comunes al hombre y al animal. Cuando
se vive un drama, esto se traduce en nosotros en realidad biológica. Si estoy
despedido, no hay realidad biológica ―despido‖,
sino que hay una realidad biológica
que es el miedo a morir de hambre. Puedo vivir pues este acontecimiento en un
sentimiento sobre estimulador de las funciones del hígado.
Christian Fleche